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Tres escándalos de corrupción impactan gobierno de Abinader

"Siempre habrá corrupción, porque esa condición no es del estado, sino de los humanos que llegan a él, pero si Abinader asegura un régimen de consecuencias para todos, entonces, es verdad que el país empezó a cambiar".
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Nueva York: En menos de 120 días, al gobierno del presidente Luis Abinader y el PRM les han estallado dentro de su propia casa, tres escándalos de corrupción administrativa. El primer caso fue el de la ministra de la Juventud, Kimberly Taveras Duarte, el segundo fue el de los 100 millones de pesos administrados de forma discrecional, en contra de la ley, dinero que fue entregado a los artistas y el tercer caso de corrupción administrativa dentro del gobierno de Abinader y el PRM, es el de Interior y Policía, con el tema de los permisos de armas.

El primer caso de corrupción administrativa, relativo a la ministra de la Juventud, Kimberly Taveras Duarte, la Dirección General de Contrataciones públicas (DGCP), ya   sometió su caso mediante la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción (PEPCA), Es decir, ya está en manos del Ministerio Público, por lo que se espera que próximamente, la señora Taveras Duarte, esté formalmente en la corte.

El segundo caso de corrupción administrativa se vincula con la contratación directa de artistas a través del Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales (GCPS), pasando por encima y violentando todos los preceptos legales que regulan el régimen de contrataciones públicas del país. Una investigación llevada a cabo por la Dirección General de Compras y Contrataciones Públicas (DGCP), determinó que el proceso realizado no cumplió con aspectos procedimentales, es decir, no se cumplió con la ley,  razón por la que procedió a rescindir los contratos, que envuelven RD$100 millones  de pesos,  que no se intentó recuperar y que vinculan  a  los señores Tony Peña Guaba y Engel Landolf,  sobre todo,  cuando se determinó que éste  último, guarda estrechas relaciones de representación con  algunos de los  artistas que fueron beneficiados. Se le quiere buscar una vuelta que el pueblo dominicano no se la cree y pide a grito que la justicia actúe y se generen renuncias, sometimientos y recuperación de los RD$100 millones.

El tercer escándalo de corrupción administrativa se relaciona con la mafia descubierta en el Ministerio de Interior y Policía, donde el señor Víctor Miguel Polanco Severino, nombrado por el presidente Abinader como viceministro, con asiento en la Dirección de Control de Porte y Tenencia de Armas de Fuego del Ministerio de Interior y Policía. Aquí se descubrió un entramado de extorsiones contra  los usuarios, además trascendió que Víctor Miguel Polanco Severino había sido cancelado de la Policia Nacional en noviembre del  2012 por supuestamente estar vinculado a temas de droga, de acuerdo con declaraciones de la policía en esa época. Una semana después  que el presidente destituyera a Miguel Polanco Severino, la Dirección de Armas de Fuego fue intervenida basándose en los presuntos actos de corrupción, junto con el funcionario, fueron cancelados 52 empleados, quienes supuestamente también participaban en la mafia del Ministerio de Interior y Policía.

El presidente dominicano, Luis Abinader, quien se ha manejado de forma brillante en el ejercicio del poder, ha dado muestra tangible de querer devolver la independencia al poder judicial y dejar que el Ministerio Público actúe sin ataduras políticas.  Debe mantenerse atento para  que en su gestión no engorde  vacas sagradas, que disminuyan la calidad moral del proceso anticorrupción que el Ministerio Público lleva acabo, con todo el apoyo de la ciudadanía. Siempre habrá corrupción, porque esa condición no es del estado, sino de los humanos que llegan a él, pero si Abinader asegura un régimen de consecuencias para todos, entonces, es verdad que el país empezó a cambiar.

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