Tribunal australiano juzga secta religiosa por provocar muerte de una niña
Un tribunal australiano comenzó este miércoles el juicio contra 14 miembros de una secta religiosa por la muerte de una niña diabética de ocho años a la que se le negó atención médica, en un incidente ocurrido en el noreste de Australia en 2022.
En este juicio a cargo del juez Martin Burns, del Tribunal Supremo de Queensland, la máxima instancia judicial de esta jurisdicción del noreste de Australia y con sede en la ciudad de Brisbane, los 14 acusados afrontan cargos por asesinato u homicidio imprudente, que se castigan con una pena máxima de cadena perpetua.
Este proceso se abrió a raíz de la muerte de Elizabeth Struhs, quien padecía de diabetes de tipo 1, el 7 de enero de 2022 en su casa de la localidad de Toowoomba, al oeste de Brisbane; su fallecimiento se produjo después de que sus padres, Jason y Kerrie Struhs, su hermano mayor, Zachary Alan, así como los miembros de la secta religiosa The Saints (Los santos), a la que pertenecía esta familia, se negaran durante varios días a inocular la insulina a la menor.
En su lugar y mientras la niña agonizaba, los padres de la menor, junto al líder de The Saints, Brendan Stevens, y otros once feligreses, abrazando su fe en el poder curativo de Dios, se dedicaron a rezar para que se sanara a través de la oración.
En el juicio que se inició hoy bajo una fuerte atención mediática, tanto el padre de la niña como el líder de la secta religiosa afrontan sendos cargos por asesinato por negar el medicamento y la atención médica a la menor.
La Fiscalía también ha acusado a Kerrie Struhs de homicidio imprudente al negar la insulina y la atención médica a su hija, según documentos judiciales.
Zachary Struhs, así como otros once miembros de la secta, también afrontan cargos de homicidio imprudente por haber aconsejado, facilitado y ayudado a los padres de Elizabeth, con sus palabras y acciones, a matarla ilegalmente.
Ninguno de los acusados ha pedido representación legal o libertad bajo fianza en este proceso que durará, según informaron fuentes judiciales a EFE, tres meses.
La hermana mayor de la víctima, Jayde Struhs, de 23 años y quien abandonó la comunidad hace 9 años, declaró, en una entrevista con el Canal 7 en 2022, que The Saints (Los santos) no mantienen relación con ninguna iglesia y creen que “Dios lo cura” todo.