Un dominicano es acusado en Massachusetts de traficar fentanilo para el Cártel de Sinaloa

Un dominicano identificado como Leury Then Rosario, residente en Lawrence, Massachusetts (Estados Unidos), enfrenta cargos en el país norteamericano por presunto tráfico de drogas en beneficio del Cartel de Sinaloa.
La justicia estadounidense asegura que Then Rosario, de 33 años, distribuía fentanilo y metanfetamina para el reconocido cartel mexicano desde North Shore, una región geográfica al norte de Massachusetts que incluye varias ciudades y pueblos costeros.
El dominicano fue acusado de conspiración para distribuir y poseer con la intención de distribuir 400 gramos o más de fentanilo y metanfetamina. La acusación llegó después de su arresto el 25 de febrero.
Dos años de investigación
En una nota de prensa publicada el mes pasado, la oficina del Fiscal del distrito de Massachusetts señaló que en la acusación se indica que la investigación sobre una organización de tráfico de drogas en el área de North Shore de Massachusetts inició en enero de 2023.
En dicha investigación se identificó a Then Rosario como un narcotraficante con sede en Lawrence que operaba como parte de esta organización, la cual estaba siendo suministrada con fentanilo y metanfetamina por una organización con sede en Sinaloa, dice el fiscal en la nota de prensa.
Dos años después, en febrero de este año, se llevó a cabo el arresto del dominicano. Inmediatamente después se ejecutaron órdenes de registro en la residencial principal de Then Rosario y un presunto escondite también en Lawrence.
“Se alega que el escondite pretendía ser un negocio de servicios múltiples con un mostrador minorista vacío en la sala principal”, indicó al respecto el Departamento de Justicia el pasado 3 de marzo.
Sin embargo, en la parte trasera del local, las autoridades encontraron dos grandes mesas de póquer estilo casino y máquinas de video póquer, así como “un sistema de videovigilancia de alta gama” que cubría todo el primer piso y el exterior.
Además, el sótano del lugar contenía dos grandes cajas de almacenamiento cerradas con llave que contenían equipos comúnmente utilizados en el procesamiento o fabricación de drogas como, respiradores, guantes, materiales de envasado de medicamentos, balanza, licuadoras y otras herramientas.
Durante el allanamiento, la investigación dio un giro cuando agentes de la policía encontraron un pequeño mando a distancia equipado con una antena extensible, que al momento de activarlo, abrió una pared tipo trampa dentro del almacenamiento, lo que dejó al descubierto un armario oculto en el que se encontraron los siguientes objetos:
- Más de 16 kilogramos de píldoras falsificadas, de varios colores y tamaños, que contienen sustancias controladas;
- Un objeto en forma de ladrillo de una sustancia pulverulenta blanca, con un peso aproximado de un kilogramo, que dio positivo a la presencia de cocaína;
- Más de dos kilogramos de presunto fentanilo prensado en unidades de 10 gramos, comúnmente conocidos como “dedos” en el tráfico minorista de drogas;
- Más de dos kilogramos de presunto polvo de fentanilo en bolsas grandes;
- Más de 25 libras de polvos sueltos en varios colores, que se cree que incluyen agentes cortantes utilizados con narcóticos;
- Una prensa comercial de píldoras utilizada para prensar píldoras falsificadas, incluidas más de 50 fundiciones a presión de píldoras con diseños para falsificar Percoet, Xanax, Adderall y otros;
- Prensas de varios kilogramos, así como sellos de marca utilizados para imprimir logotipos en kilogramos de narcóticos;
- Una pistola semiautomática Glock Modelo 33 calibre .357 cargada con seis cartuchos de munición;
- Una pistola semiautomática High Point calibre .380 cargada con ocho cartuchos de munición;
- Una pistola semiautomática Ruger calibre .380 cargada con seis cartuchos de munición;
- Dos armas de fuego estilo Glock de fabricación personal (también conocidas como “pistolas fantasma”) sin números de serie cargadas con 10 y nueve rondas de munición respectivamente; y;
- Un rifle estilo AR-15 con un calibre .458 SOCOM, cargado con ocho rondas de munición.
Más de 10 años de prisión
Por el cargo de conspiración para distribuir y poseer con la intención de distribuir 400 gramos o más de fentanilo y metanfetamina, el dominicano se enfrenta a una sentencia de al menos 10 años y hasta cadena perpetua de ser condenado.
El dominicano también está a deportación una vez cumplida la sentencia impuesta.