Un nuevo escándalo sacude a Educación: 121 subdirectores distritales nombrados en cargos inexistentes
Santo Domingo, RD.- El nombramiento de subdirectores distritales es el más reciente escándalo que sacude al Ministerio de Educación (MINERD). Un manejo deliberado de mucho dinero cuya contratación se hizo violando la Ley de Administración Pública.
Estos nombramientos han provocado que una comisión de 136 directores y subdirectores distritales desplazados denuncien lo que consideran como una arbitrariedad. El equipo de Desclasificado con Addis Burgos recibió esta comisión. Pide al nuevo ministro de Educación, Ángel Hernández, dejar sin efecto la orden departamental que ordenó Roberto Fulcar.
Bases de la denuncia
De acuerdo con una orden departamental sostenida en el artículo 217, literal “C”, la Ley General de Educación, núm. 66-97 y su Reglamento Orgánico emitido mediante el decreto núm. 645-12 deja por escrito la designación de 121 subdirectoras y subdirectores a nivel nacional.
La designación de estos nuevos subdirectores no solo contradice el Manual Operativo de Distrito de Educación. Va en contra de la ley al nombrar a 121 docentes en cargos inexistentes. Una decisión del ahora exministro Fulcar, que representa un aumento de RD$9, 680, 000 pesos de la nómina del Ministerio de Educación. Que tendrán que ser admitidos en este tiempo de crisis que atraviesa el país.
Con la promulgación de la reciente orden departamental los actuales coordinadores curriculares se dan cuenta que han nombrado a nuevas personas para ocupar su cargo. La designación califica a los nuevos incumbentes como subdirectores. La sorpresa de las nuevas designaciones los sumerge en un nuevo dilema. Por esta razón, se han visto en la obligación de solicitar respuestas ante el MINERD basándose en la resolución del Ministerio de Administración Pública (MAP).
El interés iba más allá de nombrar docentes. Se constató que no existía la necesidad de un nuevo nombramiento más que cumplir con una deuda política. Los nombramientos dejaron a ciudadanos y al Estado en aprietos. Sucedió días después de que el Ministerio de Administración Pública (MAP) y la Dirección General de Presupuesto (DIGEPRES) restringieran el ingreso de nuevo personal o movimiento de este. Tampoco se permitiría el reajuste del salario en zonas gubernamentales. Estas medidas fueron adoptadas por el Poder Ejecutivo con el objetivo de racionar el gasto público.
Otras denuncias
Desde el 2020 a la fecha, Educación ha dado respuesta a múltiples denuncias políticas. Pero ha dado largas a otros problemas que inciden en la educación y que han persistido por casi una década. Entre estos se encuentra la millonaria deuda contraída desde el 2013 con técnicos docentes. Esto a razón de incentivos por evaluación de desempeño que la misma ley establece.
Los técnicos distritales y regionales presentaron una demanda ante el Tribunal Superior Administrativo en contra del Ministerio de Educación. Resultaron favorecidos con la sentencia TC-0415-16 por el Tribunal Constitucional del 13 de septiembre del 2016. Pero no ha existido forma de que Educación asuma el mandato legal. Con gestiones se logró un acuerdo entre el ministerio y los técnicos. Se hizo el 24 de mayo del 2022 mediante el acta de conciliación núm. 0004-2022, homologada por el contrato transaccional núm. 0282. Pero los pactos siguen siendo sólo de papel.
Se llegó a un acuerdo en donde el misterio se comprometía a pagar el 50 por ciento a más tardar el 30 de julio del presente año. No obstante, hasta el momento esos pagos no han sido efectuados.
Y 127 directores distritales, con salarios de RD$121,000 pesos mensuales, a los que igualmente se les eliminaron funciones. Su atribución se limita a ir a firmar mensualmente. Cuestan a la educación del país RD$15, 367,000, lo que al año representa RD$184, 404,000 millones de pesos. Una nómina anual de personas que no ejercen ninguna función, técnicos desplazados por una nómina política. Un Gobierno dispuesto a pagar un costo tan elevado, de violar los estatutos docentes, de sacrificar la agenda educativa y evidentemente los presupuestos para completarla a cambio de cumplir con su cuota política.
