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VIDEO: Intervención completa de Javier Milei desde el World Economic Forum de Davos.

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El presidente argentino expuso ante líderes económicos y mundiales su defensa de las políticas libertarias, mientras que Sánchez propuso «un nuevo paradigma de prosperidad».

El Foro Económico Mundial reúne en Davos (Suiza), desde 1971, a los principales líderes políticos y económicos del mundo en un encuentro lleno de reuniones, mesas de debate y diálogo o reuniones bilaterales para debatir sobre la situación y el desarrollo de la economía mundial y diferentes temas de interés público a nivel internacional.

La edición de este año, la número 54, ha supuesto el estreno de Javier Milei en un encuentro internacional. El recién elegido presidente de Argentina tuvo la oportunidad de dar su primer discurso en una cumbre internacional, en el que defendió sus tesis ultraliberales y lanzó una advertencia sobre un Occidente que definió «en peligro» ante en «socialismo empobrecedor» y presentando al capitalismo de libre mercado como la única herramienta para terminar con el hambre y la pobreza.

Milei defendió en su intervención, de algo menos de media hora, que el capitalismo de libre mercado ha sido y es «la única herramienta que tenemos para terminar con el hambre, la pobreza y la indigencia», algo que, según el presidente argentino, cuenta con «una evidencia empírica incuestionable»

En un discurso lleno de elogios a los empresarios, a los que calificó como «héroes» y «benefactores sociales», Milei defendió sus tesis libertarias ante las políticas de justicia social, en contraposición a los discursos de otros líderes mundiales, a quienes señaló por «socavar los fundamentos del sistema que nos ha dado la mayor expansión de riqueza y prosperidad de nuestra historia». Además, alentó a los empresarios a no «dejarse amedrentar» por «la casta política ni por los parásitos que viven del Estado».

«La justicia social no es justa, no aporta al bienestar general y es intrínsecamente violenta», afirmó Milei, acusando al «socialismo empobrecedor» de ser «fracaso en lo económico, social y cultural y, además, asesinó a más de 100 millones de seres humanos».

El mandatario argentino atacó a las agendas internacionales del feminismo y el medioambiente y concluyó señalando al Estado como «el problema y no la solución» antes de señalar a Argentina como un «un aliado incondicional a partir de hoy» para las empresas antes de terminar con la proclama electoral de la campaña que lo ha llevado a la Casa Rosada: «Viva la libertad, carajo!». Su intervención finalizó en un silencio únicamente interrumpido por los aplausos de su Gobierno, sentado en primera fila.

Minutos después y sobre el mismo escenario, Pedro Sánchez se dirigió al auditorio de Davos con una respuesta inequívoca: «Las políticas neoliberales no funcionan». El presidente del Gobierno defendió que es posible «crear un nuevo paradigma de prosperidad» que combine «el crecimiento económico con la sostenibilidad ambiental y la prosperidad para todo».

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