El presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, se comprometió a impulsar una ley que prohibirá la prostitución en el país, y alegó que esta práctica “esclaviza” a las mujeres.
Esta afirmación fue propuesta por Sánchez durante un discurso celebrado el domingo en la clausura del 40 Congreso Federal del Partido Socialista Obrero Español (PSOE).
“Sale de este congreso un compromiso que llevaré a término. Avanzaremos aboliendo la prostitución que esclaviza a las mujeres en nuestro país”, dijo el presidente durante el congreso celebrado en la ciudad de Valencia.
Uno de los principales objetivos ante estas afirmaciones será el de erradicar el tráfico humano, que fue definido por el presidente de la Generaliat valenciana, Ximo Puig como un “símbolo de perversión de la esclavitud”, que según sus palabras, no puede permitirse “en ningún país decente”, reseñó La Vanguardia.
En España, actualmente la explotación sexual y el proxenetismo son ilegales; sin embargo, la prostitución no se encuentra regulada bajo mandato.
Además, en España existe una nutrida cantidad de prostíbulos que suelen funcionar tanto en hoteles como en otros lugares de alojamiento, pese a que no es considerado como un empleo “corriente”.
Asimismo, grupos de activistas han afirmado que la situación legal de la prostitución en España ha nutrido la demanda de mujeres que han sido víctimas de trata.
Se contempla también que se pueda castigar legalmente a los clientes o locales que estén involucrados en casos de prostitución.
Pero para poder aprobar esta ley que ilegalizaría a la prostitución, se necesitarán modificar otras leyes de ámbito estatal, en un texto que subraya que castigar el proxenetismo es la fórmula para terminar con la mayor transgresión de los derechos humanos de las mujeres y niños, informó AFP.
Según un sondeo realizado en 2009 por el Centro de Investigaciones Sociológicas, uno de cada tres hombres en España ha pagado por tener relaciones sexuales al menos una vez en su vida.
El texto subraya que castigar el proxenetismo es la fórmula para terminar con la mayor transgresión de los derechos humanos de las mujeres y los niños.
Previo a la consulta general que se celebró en 2019, el PSOE había publicado un manifiesto que hablaba sobre la situación de las mujeres, en donde ya proponían la ilegalización de la prostitución, catalogado como “uno de los aspectos más crueles de la feminización de la pobreza, y una de las peores formas de violencia contra la mujer”.