Adversarios de Eligio Jáquez intentan sin éxito destruir una trayectoria impecable
Nueva York: He visto con asombro y tristeza los ataques desmedidos y crueles en contra del cónsul dominicano en la Gran Manzana, Eligio Jáquez, una persona a la que personalmente respeto por los elevados méritos que ha alcanzado basado en su longeva trayectoria en su vida política, pública y familiar.
En los últimos meses, las cuentas de redes sociales de Jáquez han sido Hackeadas con intenciones de hacerle daños, engañando personas en su nombre, también su cuenta de WhatsApp. Y como si todo esto fuera poco, ahora está en curso una campaña de descrédito infundada protagonizada por personas, que no vale la pena mencionar en este artículo, pero que ya están debidamente identificadas, que apuestan al postulado de que repetir mucho una mentira, la convierte en apariencia, en una verdad.
En este artículo, no voy a defender a Eligio, porque no es necesario. A Eligio Jáquez lo defiende su trayectoria y hoja de vida, que sí voy a compartir a continuación:
Eligio Jáquez es una figura destacada en la política de la República Dominicana, conocido por su dedicación al servicio público y su influencia en diversas áreas gubernamentales. A lo largo de su carrera, ha desempeñado múltiples roles clave que han dejado una huella significativa en el panorama político del país.
Eligio Jáquez nació el 1ro de diciembre de 1949 en Cayetano Germosén, un municipio de la República Dominicana situado en la provincia de Espaillat. Desde joven mostró interés en la política y en el servicio a su comunidad. Estudió ingeniería Agronómica en el instituto Politécnico Loyola, en la universidad Federico Henríquez y Carvajal y en la universidad Shefhayin de Israel, lo que le permitió adquirir una perspectiva técnica y práctica sobre las necesidades agrícolas y rurales del país.
Jáquez inició su carrera política como miembro del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), uno de los principales partidos políticos del país. En sus primeros años, se destacó por su trabajo en el sector agrario y por su compromiso con el desarrollo rural. Su experiencia como ingeniero agrónomo le otorgó credibilidad y le permitió conectar con las comunidades rurales, un aspecto crucial en su ascenso político.
Uno de los hitos más importantes en la carrera de Eligio Jáquez fue su nombramiento como Ministro de Agricultura durante el gobierno de Hipólito Mejía (2000-2004). En este cargo, Jáquez implementó diversas políticas destinadas a modernizar el sector agrícola y a mejorar las condiciones de vida de los agricultores. Su gestión se centró en la tecnificación del campo, la promoción de la agroindustria y el fortalecimiento de las instituciones agrarias. Bajo su liderazgo, se lanzaron programas para aumentar la productividad y competitividad del sector, así como para asegurar la sostenibilidad y la seguridad alimentaria de la República Dominicana.
Además de su papel en el Ministerio de Agricultura, Eligio Jáquez ha ocupado varios cargos legislativos y políticos que han consolidado su posición como un líder influyente en la política dominicana. Ha sido diputado, representando a su provincia natal y trabajando en comisiones relacionadas con el desarrollo económico, la agricultura y la reforma legislativa.
En la última década, Eligio Jáquez ha sido una figura prominente en el Partido Revolucionario Moderno (PRM), una escisión del PRD que se ha convertido en la principal fuerza política del país. En el PRM, ha desempeñado roles de liderazgo y ha sido un estratega clave en la consolidación del partido y en sus campañas electorales. Su experiencia y conocimiento político han sido fundamentales para el éxito del PRM en las elecciones presidenciales y legislativas. En 2024 fue coordinador general de la reelección del presidente Luis Abinader en la circunscripción #1 del exterior, que abarca Estados Unidos y Canadá.
Como cónsul de Nueva York, Jáquez ha revolucionado esa delegación diplomática.
En agosto de 2020, el presidente Luis Abinader nombró a Eligio Jáquez como Cónsul General de la República Dominicana en el estado de Nueva York. En este rol diplomático, Jáquez ha trabajado para fortalecer las relaciones bilaterales entre los dos países, promoviendo el comercio, la inversión y la cooperación en diversas áreas. Su gestión se ha centrado en fomentar una mayor colaboración en temas de seguridad, desarrollo económico y cultural, así como en apoyar a la diáspora dominicana en la Gran Manzana.
A lo largo de su trayectoria, Eligio Jáquez ha demostrado un compromiso inquebrantable con el desarrollo de la República Dominicana y el bienestar de su gente. Su labor en el sector agrícola, su participación en el ámbito legislativo y su rol como diplomático han sido testimonio de su dedicación al servicio público. Jáquez es reconocido por su integridad, su capacidad de liderazgo y su visión para un país más próspero y equitativo.
En conclusión, la carrera política de Eligio Jáquez es un reflejo de su profundo compromiso con su país y su determinación para enfrentar los desafíos y aprovechar las oportunidades en beneficio del pueblo dominicano. Su legado perdurará como un ejemplo de dedicación y servicio en la política dominicana.
Es innegable la transformación del consulado dominicano de Nueva York, que ha sido nombrado por la misma diáspora como “El Palacio Chiquito en Nueva York”, mote que le viene dado porque los Quisqueyanos que llegan al consulado en busca de resolver algún problema, encuentran allí concentradas múltiples oficinas gubernamentales que brindan sus servicios a los sin tener que viajar al país para adquirirlos.
Así que, amigo Jáquez, que la calumnia, la envidia y la maldad, nunca puedan obnubilar tu grandeza. Según el sabio Sócrates, cuando alguien dice algo de mi amigo, debo pasarlo por los tres filtros: La verdad, la bondad y la utilidad. A juicio del sabio, estas son las preguntas que toda persona se debe formular antes de decir algo. La primera: ¿Estoy seguro de que lo que voy a decir es cierto?; la segunda: ¿Lo que voy a decir es bueno?, y la tercera: ¿Es útil lo que voy a decir?