Jason Miller declaró a Newsmax que el exdirector del FBI, James Comey, “fue atrapado” y ahora tiene que “pagar la factura”.

Jason Miller, exasesor principal de Donald Trump y actual analista político, afirmó en una entrevista con Newsmax que el exdirector del FBI, James Comey, “fue atrapado” y que ahora “debe pagar las consecuencias de sus actos”. Las declaraciones de Miller se produjeron horas después de que se confirmara la acusación formal contra Comey por presunto falso testimonio y obstrucción de un proceso del Congreso, cargos relacionados con su papel en las investigaciones sobre la interferencia rusa en las elecciones presidenciales de 2016 y las filtraciones a la prensa en años posteriores.
Durante el programa, Miller recordó que Comey había asegurado en audiencias previas ante el Congreso que nunca autorizó filtraciones de información a medios de comunicación, pero que documentos y testimonios revelados en los últimos meses indican lo contrario. “Mintió descaradamente al Congreso y al pueblo estadounidense. Se pensó intocable, pero finalmente fue alcanzado por la justicia”, dijo Miller, subrayando que “nadie, sin importar su cargo o influencia, está por encima de la ley”.
El exasesor de Trump describió la imputación de Comey como “un momento de reivindicación” para quienes durante años denunciaron irregularidades dentro del FBI. Según Miller, la agencia “fue utilizada como herramienta política” bajo la dirección de Comey, en especial durante las investigaciones que afectaron a la campaña presidencial de Trump en 2016. “Este es solo el comienzo. Durante años, la cúpula del FBI actuó con impunidad, y ahora los estadounidenses finalmente están viendo que las instituciones pueden rendir cuentas”, enfatizó.
Miller también elogió a la fiscal federal Lindsey Halligan, quien asumió el caso después de la sorpresiva renuncia del fiscal Erik Siebert, y expresó confianza en que el proceso judicial será sólido y transparente. “Sé que intentarán proteger a Comey desde ciertos sectores del sistema, pero Halligan tiene la firmeza y la experiencia para llevar este caso hasta las últimas consecuencias”, afirmó.
Además, Miller insinuó que otras figuras políticas y exfuncionarios de alto rango podrían enfrentar procesos similares, un comentario que alimentó la especulación en Washington sobre posibles próximos pasos del Departamento de Justicia. “Comey es solo el primero. Hay otros que jugaron con la ley, mintieron y manipularon. El país merece saber toda la verdad”, concluyó.
Las palabras de Jason Miller se suman a un clima político ya cargado de tensiones tras la acusación contra James Comey, un hecho que ha provocado reacciones encontradas: mientras los aliados de Trump celebran la imputación como un triunfo de la justicia, críticos y defensores del exdirector del FBI alertan sobre un uso político del sistema judicial que podría marcar un peligroso precedente para la democracia estadounidense.



















